En estos últimos años se ha producido un aumento exponencial de su uso por la expansión de sus indicaciones clínicas, con la inyección de fármacos para el tratamiento de distintas entidades.
Se presenta un estudio de 30 pacientes diagnosticados de oftalmopatía tiroidea y tratados con triamcinolona y dexametasona. Se aprecia una marcada mejoría de visión.
El objetivo de este estudio es comparar la inflamación orbitaria antes y después del tratamiento con triamcinolona para-bulbar en pacientes con oftalmopatía distiroidea moderada o severa.